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9 de julio: Aniversario de la Patria

En otros aniversarios de la Patria hemos resaltado el papel del pueblo, el papel de los trabajadores en nues­tra historia.

Hemos señalado el rol de los grandes arquitectos: San Martín, Belgrano, Brown y Güemes y el rol de los humildes constructores: Cabral, Albarracín, Gómez y Zalazar.

También hemos expresado que el pueblo, que en medio de todas las adversidades, declaró y defendió la Indepen­dencia de Fernando VII, sus sucesores y metrópolis y DE TODA OTRA DOMINACION EXTRANJERA, puede en nuestros días afianzar su independencia y organizarse en una convivencia, que, superando los errores del pasado, posibilite un futuro de libertad, bienestar e independencia nacional.

En este 163 Aniversario de la Independencia Nacional, empeñados y comprometidos en el rescate y la difusión de los valores trascendentes de la nacionalidad, señalamos ante los ojos de nuestros compatriotas, fundamentalmente de la juventud, la conducta de un puñado de patriotas, que, armados única­mente de una incontenible y pura pasión argentina, sacudieron la estructura de la entrega y la corrupción, al constituir F.O.R.J.A. ( Fuerza de Orientación Radical de la Joven Argenti­na), el 29 de junio de 1935.

F.O.R.J.A, fue la hermosa flor que nació en medio del lodo de la Década Infame, tal como nuestros ceibos na­cen en las barrosas costas de nuestros arroyos y ríos.

En el primer considerando de su Declaración de Principios, F.O.R.J.A. expresó: "Que el proceso histórico argentino en particular y el americano en general revelan la existencia de una lucha permanente del pueblo en procura de su sobera­nía para la realización de los fines emancipadores de la Revolución Americana, contra las oligarquías como agentes de los imperialismos en su penetración económica, política y cultural, que se oponen al total cumplimiento de los destinos de América".

En el primer punto de su Declaración manifestó: "Que la tarea de la nueva emancipación sólo puede realizarse por la acción de los pueblos".

Siguiendo a Scenna, autor de "F.O.R.J.A. Una Aventura Argentina" -de lectura inexcusable-, acerca de los orí­genes de este movimiento, diremos: "abundaban los hijos de gringos, faltaban apellidos tradicionales, pero aquellos argentinos de primera o segunda generación entablaron, incluso sin saberlo, una lucha sin precedentes por lo valerosa y valiosa".

"¿Cuáles fueron las fuentes del pensamiento forjista?. Dos principales reconoce: el Irigoyenismo y la Reforma Universitaria de 1918. Del primero se consideró continuador di­recto, y de él tomó el nacionalismo esencial que fue su característica inminente, la defensa de la soberanía política, económica y cultural, el sentido latinoamericano que insertó en su prédica. De la segunda extrajo el sentido renovador, igualitario en el plano social, educacional y también nacional, que se quiso dar al movimiento nacido en Córdoba".

Allí se alinearon los gigantes de la dignidad nacional; fueron gigantes porque se sometieron a una empresa gigante: la defensa moral y material de la Patria.

Allí se alinearon esos hombres cuyos nombres y cuyas obras desconoce la juventud, por ser silenciados por la estructura de los medios de comunicación que se hallan financiados por los intereses antinacionales.

Allí, entre tantos otros patriotas, formó Ar­turo Jauretche, ese poeta bárbaro e indomable de lo nacional ; su primer presidente, Luis Dellepiane, patriota y guardián incorruptible del patrimonio nacional; Jorge del Río, gigante argentino, fiscal de los trusts eléctricos, que tanta falta nos hace en nuestros días y cuyo nombre llevará la obra energética más grande de nuestra tierra cuando el pueblo ejerza la soberanía popular; Homero Manzi, expulsado de la Facultad de Derecho en 1930 por lealtad al pueblo y que a los 20 años expresara: "Tengo por delante dos caminos: Hacerme hombre de letras o hacer letras para los hombres", marcando así el norte para los poetas de nuestra tierra y de todas las tierras; y Raúl Scalabrini Ortiz, síntesis maravillosa del espíritu de F.O.R.J.A. , de lo nacional y de lo popular, de lo exquisito y de lo masivo, uno de los sensibles puentes de nuestra historia entre el intelecto y el pueblo, figura señera a cuya vera se producirá el reencuentro definiti­vo de las mayorías nacionales.

Pretender borrar su nombre de las calles de Buenos Aires, no incorporar al patrimonio histórico nacional su último hogar, es no comprender la esencia de nuestra Argentina independiente.

En este aniversario de la Patria, con todas  nuestras limitaciones, pero con todas nuestras fuerzas, pensan­do con Scalabrini que somos más fértiles y posibles, porque es­tamos más cerca de lo elemental, convocamos a nuestros compatrio­tas y sobre todo a nuestra juventud a rechazar la droga, la pornografía , el juego, los tragamonedas y el terror, que son las únicas alternativas que le ofrece esta sociedad de consumo -que se nos impone desde afuera con la complicidad de los de adentro-, a volver la cabeza hacia las cumbres de la Nación, hacia las cumbres de nuestra historia; en ellas, en medio de la pureza y grandeza de su blancura, encontrarán la obra de F.O.R.J.A. y de sus hombres. Ellos sí, están alineados en aquella columna que enca­beza el Padre de la Patria, a la cual dio bandera aquel otro puro patriota a orillas del Paraná y a la cuál dotó de contenido trascendente aquel joven argentino al cuál la muerte, para apa­garlo, tuvo que sumergirlo en las profundidades del océano.

Se equivoca, quien en el mundo piense que al pueblo argentino, se lo puede domesticar en la dependencia y en la expoliación. Al pisar la tierra salteña el General realista Valdez exclamó: “A este pueblo no lo conquistaremos jamás, al ver a un niño de cuatro años, que montaba a caballo, a la voz de la madre y partía a todo escape para llevar a sus hermanos la voz de alarma contra el invasor”.

Argentinicemos nuestra Argentina rescatando los valores de nuestra historia nacional y recordando hoy a los nombres que el 29 de Junio de 1935 forjaron esa maravillosa obra de dignidad y de soberanía que fue F.O.R.J.A.

Guillermo Estévez Boero

Reproducido por el Centro de Estudios Acción Argentina en ocasión de cumplirse el 163 Aniversario de la Independencia Nacional.


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